Vendemos fe porque la tenemos. Porque la hemos tenido y amamantado es este largo y cálido verano, y porque seguimos creyendo y confiando en el proyecto. Pero en días como hoy, ( escribo estas líneas en domingo por la noche después de una largo viaje de vuelta a casa), hay que hacer un sobreesfuerzo para seguir manteniendo esa fe mas inalterable que nunca. Hay que hacer un sobreesfuerzo para no caer en la tentación de creer que nuestro equipo va a terminar fagocitado, una año más, por la podredumbre balómpedica de la segunda división, hay que seguirse esforzando para no pensar que va a acabar siendo uno más de esta categoría donde abunda el fútbol de subsistencia y el juego de trazo grueso y hay que terminar de esforzarse todavía más, para pensar que la maratón que termina en junio tendrá un final feliz para el Tenerife.
Para empezar, no termino de entender la borrachera de cambios en la alineación con la que se autoobsequió el cuerpo técnico. La obsesión ( primero obsesión en el entorno, que en segundo término acaba por abducir al entrenador ) por los goles encajados a balón parado, nos lleva a permutar dos de los 4 puestos de la defensa, dejando en el banquillo al central más en forma de los cuatro, léase Pablo Sicilia y a prescindir de un lateral izquierdo que ha mantenido una regularidad en su rendimiento a prueba de bomba . En cuanto al cambio de Oscar Pérez, su salida del once estaba cantada y estoy completamente deacuerdo con ella, pero ..¿ era la vuelta de Richi la solución más adecuada? ¿ Cuándo se va a dar cuenta Oltra de que Alfaro debe jugar por el centro de una vez por todas? ¿ Para cuando una pareja Ricardo/Alfaro en el centro con Kome e Iriome o Juanlu en la banda ?
Una semana más quiero referirme en particular a Ricardo, y en definitiva a la situación del puesto más fundamental de este equipo, el de medio centro. He reiterado en todos los foros que he podido, los elogios a este futbolista, con el que ya se me agotan las hipérboles acerca de su calidad , su presencia y su carácter. En esta ocasión, Ricardo no tuvo su mejor día, estuvo muy perdido en la primer parte y cuando intentó reaccionar en la segunda ya era tarde. Lo cual me lleva a dos refelxiones : primera, la temporada que Ricardo complete 30 buenos partidos será la del ascenso del equipo a primera y por extensión el jugador se ganará un buen contrato en la máxima categoría, posiblemente en un equipo más poderoso que el Tenerife. La segunda reflexión, me lleva afirmar que no hay recambio en este equipo para el espigado medio centro blanquiazul , y que por tanto, igual que se intentó traer a Alex Quillo en verano, habrá que fichar un medio centro en el mercado invernal . Quedó patente en Balaídos, que el día que Ricardo no nos regala su verticalidad , su maestra dirección del juego , y sus pases en diagonal , el equipo está a la deriva, sin rumbo, como la ha estado, señores rectores tinerfeñistas, en el 75% de los encuentros que nuestro equipo ha disputado en territorio peninsular en los últimos 6 años.
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