
Vergonzosa la actuación ayer de
Sandoval en la sala de prensa del
Rodríguez López. Intento ser comedido en los adjetivos, pero sinceramente, aparte de su escaso dominio de la lengua castellana, el entrenador del
Rayo hizo el más espantoso de los ridículos. A parte de desconocer que el "numero 23" del
Tenerife se llama
Sebastián Dubarbier ( lo cual dice mucho de él como
entrenador ) le recordaría ayer al señor
Sandoval que si hubo alguien que mereció la expulsión fue
Pitti ( su
jugador número 10 ) y que el señor
Pino Zamorano a quien realmente perjudicó, fue al C.D.
Tenerife. Es increíble, que por reiteración en las faltas,
Pitti no acabara e
n la caseta por la vía rápida, pero además su alusión a las fuerzas de seguridad y su más que justificada carga contra los
aficionados vallecanos, rozó lo patético. Entre éste y su presidenta, se han lucido con el C.D.
Tenerife y con nuestra tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario