lunes, 1 de diciembre de 2008

AL FIN DEL DIA

Escribo estas líneas después de un trepidante día, en el que el fútbol, y por extensión el deporte, nos han mostrado su peor cara. Datos, reacciones, ruedas de prensa, opiniones, todas ellas me dibujan un escenario, en el que el Tenerife me parece una víctima colateral de un pobre hombre llamado Jesuli , futbolista acabado, y donde dudo mucho acerca del papel que juega el siniestro Badiola. Francamente, jamás imaginaría a Cristo Marrero, vendiendo su amor al Tenerife por 6000 euros, ni por 60000. Jamás vería a Iriome o a Ricardo, pisoteando el escudo que llevan con orgullo por dinero. No lo concibo. Y ahí se me cae toda la historia por su propio peso.
Creanme, que para alguien que trabaja en un medio nacional, es duro entrar para contar al resto del país que nuestro Tenerife es noticia, por la basura creada por el tal Jesuli y por Badiola. Sobre todo después del partidazo de primera, que ayer vimos en el Rodríguez López. Y lo preocupante, lo que nos va a quedar a partir de ahora, cuando la marabunta nacional pase, es cómo va a afectar todo esto al rendimiento del equipo. ¿ Nadie se ha acordado hoy que jugamos el domingo en Murcia ? Ese es el fondo de la cuestión para cualquier aficionado tinerfeñista. hasta la fecha, desde la entrada en el club de Miguel Concepción, la trayectoria de la institución es inmaculada. Este año se hablaba sólo de un objetivo deportivo, el del ascenso. El Tenerife pasó de ser el Tenerife del caso Jordi, caso Barata, o caso Marioni, al Tenerife que habla de fútbol, de ascenso y de los goles de Nino. Hasta que un sujeto, que llegó aquí rebotado porque no tenía equipo gracias a Alfonso Serrano, mancha la trayectoria reciente de nuestro club.
Si alguien tiene una sola duda, háganme caso y autorespóndanse a esta pregunta ¿ Se imaginan a Cristo con un saco de 6000 euros en Las Zocas? Yo desde luego que no. Y espero que el tal Jesuli pague algún día por esto.

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