domingo, 22 de febrero de 2009

REFELEXIONES EN BLANQUIAZUL

¿ Qué más se puede pedir después de lo visto ayer ? Pocas veces un resultado es tan injusto. De facto el partido del Alcoraz es muy similar al de hace tres semanas en el Nou Estadi. El Tenerife deja una estela de neta superioridad sobre el rival, navega en un mar de solvencia, de recursos futbolísticos ofensivos, y por si fuera poco, vuelve a dejar su portería a cero. Sólo un milagro, y el acierto del guardameta Eduardo, evitaron que el equipo de Oltra anotara una sola de las 5 clarísimas ocasiones de las que dispuso. Repito, no se puede pedir más este equipo ni reprocharle su enorme capacidad para sacar adelante los partidos.
Espero no estar contagiado gravemente del virus de la euforia, pero creo firmemente, que si la competición sigue transcurriendo por cauces normales, entendiendo por "cauces normales" que no haya lesiones de gravedad en puestos clave del equipo, es cuestión de tiempo, y de ver en que jornada el equipo logra el objetivo del ascenso. Así de claro. Que nadie me tilde de excesivamente eufórico, porque es una reflexión que hago desde la tranquilidad y desde un frío análisis de la situación. Comprendo perfectamente que éste, es un discurso que en ningún caso pueden esgrimir y mantener los protagonistas en primera persona, los profesionales, porque iría en contra de la propia meta marcada, pero es algo , que en condiciones normales, está cada vez más cerca. Sólo me queda una duda, que espero despejar entre marzo y abril, a saber, la visita a campos importantes como La Romareda, Vallecas, Salamanca o Anoeta. La confirmación de la alternativa ( permítanme el símil taurino ) hay que ganarla en esas plazas, aunque si la trayectoria en casa sigue siendo la adecuada, no hay que preocuparse demasiado clasificatoriamente hablando. De momento, sigamos disfrutando y a divertirse en la piñata, que nos llega el Celta.

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