miércoles, 21 de enero de 2009

RAFA SANZ Y SUS REFLEXIONES



Acostumbrados estamos a que las declaraciones de Rafa Sanz no dejen indiferente a nadie. Es un entrenador que se gusta en la rueda de prensa semanal , y que mezclando el gracejo andaluz con con ciertas dosis de chulería ( sin querer darle un tinte peyorativo al término ) acaba dando titulares jugosos al periodista. Sin embargo, lo de hoy en la COPE no me ha gustado demasiado. Respetables son todas las opiniones, empezando por la del propio coach del equipo cuya opinión por supuesto lo es, pero hablar de marketing barato y de "crear estrellitas cuando todavía no son ni farolillos de feria" aludiendo a Lamon Hamilton, no me parece lo más correcto. Y ojo, que nadie nos acuse de sacar cosas de contexto,que no quitamos ni una coma. Ese marketing barato, es el mismo de "llévate a Barbour a casa por 60 euros" , que por cierto, ayudó a vender muchos abonos y la afición necesita un referente, que hoy por hoy, por su aportación al equipo y sus acciones espectaculares es Lamon Hamilton.
Capítulo aparte, merecen las razones por las que un entrenador que gana por más de 30 puntos en un último cuarto en que endosa al Illescas un resultado parcial de 22 a 9, no da ni un sólo minuto a uno de los dos jugadores vinculados que habitualmente entrenan con el primer equipo, Miguel Ryan, y al otro vinculado, Samuel Albertos lo saca para jugar un minuto y 23 segundos. Dice Rafa Sanz, que no es conservador por tal decisión y que " lo conservador sería hacer las cosas por populismo. En mi equipo juega quien se lo gana, tengas 15,20,25 o 35 años". Deja entrever el técnico por tanto, así lo deduzco yo, que ni Ryan ni Albertos se ganaron jugar ese partido en el caso del primero y algo más de ese minuto y medio el segundo.
Vayamos por partes. Me consta que la cuestión ha llegado al consejo de administración y que hay algunos consejeros que no están nada contentos con el tema, por un motivo que resulta evidente, y es que, con estas decisiones poco se ayuda a que nuevos valores se esfuercen por subir al primer equipo. Viendo la poca o nula recompensa que reciben en forma de minutos ¿ Que motivación van a tener para doblar entrenamientos con el equipo filial y con el primer equipo ?. De cualquier forma, no es conveniente generalizar. Me cuentan que en el club, en general, no andan demasiado contentos con la actitud exhibida por Ryan en los últimos meses, que se ha "acomodado" , lo que podría cortar su progresión. Muy distinto es es caso de Samuel Albertos. Salta a la vista que no es Michael Jordan, pero entrena con una actitud encomiable, es inasequible al desaliento, y desde luego, en un partido que ganas de 30, podría tener su premio. ¿ O no, Sr. Sanz ?


2 comentarios:

pedrodolcet dijo...

Hola Guillermo, lo que sucede es que Rafa se crece en las ruedas de prensa y creo que habla sin pensarlo bien, lo contrario sería horrible. Este equipo sin Baurbour juega mejor, y eso que alguien muy proximo a Rafa, en una comida antes de empezar la temporada le propuso que por el bien del equipo podria descartar al de Kentacky.

Rafa tiene sus cosas muy buenas como el pulso le hizo a la directiva entre Barbour y él, que le salió bordado. Y malas como algunos partidos que ha perdido por no leer bien el final del partido, sobre todo la temporada pasada y que parece que se han olvidado.

Albertos se merecia mas minutos en el ultimo cuarto no creo que sea por ser conservador si no por no pensar en la posibilidad. Tiene Rafa una cabeza privilegiada, si nos fijamos en los minutos que fuega habitualmente cada jugador los reparte casi por igual y lo hace mentalmente son necesidad de apùntar nada, por eso creo que hasta que faltaron dos minutos no se le "ocurrió" sacar al chico. Que por cierto fue muy aplaudido, no le falto valor para intentar un triple y regateó a un contrario con un autopase por la espalda. Esperemos que Rafa le de mas minutos en algun otro partido que tengamos tan cómodo. Un saludo, Pedro.

Guillermo Garcia dijo...

fectivamente Rafa tien cosas buanas y malas y un gran carácter, por eso es un buen entrenador, pero tiene que encontrar un equilibrio en la balanza